¿Es que estamos locos, o qué?

Si algo tiene Internet es la posiblidad que nos ofrece a todos sus usuarios de medir prácticamente la cosa más absurda de lo que pasa en nuestras páginas. Ya sea a través del célebre Google Analytics, o de cualquier otro tipo de herramienta, el saber cómo y quién llega a la información que lanzas resulta, cuanto menos, curioso.

Repasando las cifras, me he dado cuenta de una cosa: hay a muy poca gente a quienes le interese realmente lo que cuento. Bueno, sé que suena a catastrofista, pero qué se le va a hacer, estoy en un día de esos en los que lo mandarías todo a la mierda a la más mínima. Me explico.

Salvo los fieles a quienes agradezco enormemente que pasen una parte de su tiempo en leer lo que uno escribe, la gran fuente de visitas que recibimos los bloggers procede de búsquedas en la red. Repasando la lista, encuentras de todo, como en botica, aunque lo más curioso es que una de las noticias más leídas fue un post de Gran Hermano 9, en el que precisamente no salía muy bien parado.

¿Qué quiero decir con esto? Simplemente, que el morbo domina nuestras vidas, que hemos dejado de lado la razón y el sentido común en beneficio de un planeta de los simios en el que todo lo que huela a cultura o a creatividad es repelido como una vaca se sacude las moscas que revolotean alrededor de su trasero. Hombre, entiendo que no a todo el mundo le guste lo que publico, pero ¡joder, Gran Hermano 9! Siento que he perdido la batalla en favor de la ciega, el transexual, las gemelas y Mercedes Milá (sí, la que mea en la ducha).

PD: no sé si os habréis dado cuenta, pero he puesto unas cuantas veces el nombrecito de tan lamentable esperpento televisivo .¿Qué apostáis que mañana sale como el post más buscado? En fin, pase lo que pase, seguiré al pie del cañón con todo aquello que se me ocurra y que crea que pueda merecer la pena, pase lo que pase.