...Con sentencia judicial o sin ella, todo sigue igual
La guerra del fútbol va camino de ser como la Guerra de Irak (perdonad por banalizar uno de los peores ejemplos de lo que puede llegar a hacer el hombre): al principio, te sorprende; luego, te indignas y vas en contra del fuerte (en este caso, Sogecable); al final, acabas acostumbrándote a que cada día ocurra una nueva catástrofe.
Esta semana reflexionábamos acerca de la sentencia dictada por un tribunal de Madrid por la que se instaba a Mediapro y Audiovisual Sport a mantener el modelo de explotación de la temporada pasada. Cuando todo parecía que iba a arreglarse, con Roures en plan 'niño bueno' (eso si, sin traje de comunión), resulta que Sogecable saca pecho y dice que pasa de negociar al considerar que la Liga está compinchada con la productora catalana, y es por eso por lo que le da el mejor partido de la próxima jornada, el Espanyol - Real Madrid (como soy del atleti, me parece cojonudo que el plus de Atletico Madrid - Zaragoza, así que no me quejo...).
Esta actitud, a medio camino entre la prepotencia y el infantilismo, es una nueva prueba de hasta dónde se puede llegar a la hora de tensar una cuerda. El problema (del cual creo que Sogecable no se ha percatado o no quiere percatarse) es que esta cuerda termina rompiéndose, concretamente en 2009, cuando Mediapro detentará los derechos de más de una treintena de clubes de Primera y Segunda División. Quizás sea por eso por lo que desde Tres Cantos se esté vendiendo tan cara su derrota...aunque, por otro lado, quien ríe el último, ríe mejor...¿o no?

No hay comentarios:
Publicar un comentario